Muy atentos a la idea de división de cocina que os traemos en esta ocasión, estética y sobre todo, funcional. Un cerramiento de herrería en acabado en negro es lo que separa la cocina de nuestro proyecto, una forma de división y unión visual al mismo tiempo. Es una muy buena opción para una situación que vivimos y que se nos presenta a diario; «Quiero unificar mi cocina con el salón, pero no me atrevo por los olores». Pues bien, ¡En Zuhaldi tenemos respuesta para todo! Una solución puede ser la colocación de una buena campana, o para los que no les convence, una división por medio de una cristalera como esta que veis de ejemplo.

En este caso esta cristalera se compone de fijos y correderas que nos darán una apertura al vértice respetando un paso mas que suficiente. Una de las puertas correderas se esconderá en un tabique dejándola completamente invisible al estar abierta, y la otra, es plegara sobre un fijo haciendo su recogida lo mas cómoda posible.

¿Por que optar por una corredera en vez de por una puerta batiente convencional? ¡Es muy sencillo! Todo se resume al espacio del que disponemos, por supuesto que muchas veces consideramos la opción de puerta corredera por comodidad y estetica, pero principalmente lo que nos hace descartar la posibilidad de una puerta batiente es lo que esta nos invade en la estancia.

Al adentrarnos en la propia cocina, nos damos cuenta de lo bien aprovechado que esta todo el espacio, dejándonos como resultado una cocina coqueta que no puede echar nada en falta.

¿A vosotros que os parece este proyecto? ¡Os escuchamos!